Conocimos a Carla mientras cubríamos un evento muy especial para una gran amiga suya… y nuestras cámaras se enamoraron de ella, de su mirada y su sonrisa. Cuando a los pocos días me llamó para contarnos su historia supe que habíamos conocido a alguien muuuy especial! Lástima no haberlo hecho antes, nos hubiésemos ido a hacer su boda en Perú sin pensárnoslo ni un segundo!!!
Pero como eso ya lo tenían comprometido, lo que nos pidieron fue contar su pedacito de historia aquí. Y eso hicimos con un bonito reportaje de preboda por alguno de los rincones más emblemáticos de Valladolid, convertidos ya en sus lugares favoritos.
Comenzamos en la Playa de las Moreras, a Mauricio le encanta el Puente Mayor por el que fluye nuestro río, y ahí, descalzos sobre la arena, hubo besos, abrazos y juegos que nos llevaron hasta las barquitas atracadas junto al barco La Leyenda del Pisuerga, al Jardín de las Moreras, rodeados de rosas y risas… PAUSA …
Nos contaron que llevan ya varios años en España y que la idea de hacer este reportaje era porque querían enseñarle la ciudad en la que viven a sus familiares y amigos durante su boda en Perú, y por eso lo de hacer unas fotos en los sitios más especiales. Así que hicimos una pausa y… SORPRESA!!!… les llevamos al mirador de Fuente el Sol y ahí, con la ciudad a sus pies, las emociones se dispararon…
Tras recuperar el aliento seguimos nuestro periplo pucelano por el Campo Grande, la Plaza Zorrilla, La Antigua y el entorno de La Catedral, donde recuperamos fuerzas para llegar hasta la Cúpula del Milenio iluminada por la noche, y entre risas, charlas y unas cervecitas, dimos por terminada la gran tarde que pasamos junto a ellos….
Esto es solo el principio, después hicimos otros dos reportajes más. Pero eso ya… es otra historia!
Gracias pareja, gracias por cruzaros en nuestro camino y regalarnos tantos momentos bellos!!!

Gracias! Por contar nuestra historia! , ha sido un gran placer conocerlos y que sean ustedes los que nos acompañaran en estos momentos tan lindos y especiales para nosotros. Son los mejores. Los queremos. Mau y Carla.